Abordaremos aquí el análisis de una representación gráfica donde se presenta la estructura de la población de los habitantes de España en el año 2007 en función del sexo y edad. Se trata de un gráfico de barras horizontales cuya fuente es el instituto nacional de estadística, concretamente el censo del 1 de Enero de 2007.
El eje horizontal representa la cantidad de población, expresada en cifras absolutas o en tantos por ciento. En la parte izquierda los efectivos de la población masculina y a la derecha los de la población femenina.
El eje vertical representa la edad, comenzando en el grupo de 0-4 años ,aumentando de cinco en cinco años hasta la cúspide de la pirámide que se sitúa en +85 años.
La pirámide de población de España en 2007 presenta una forma de urna característica del régimen demográfico actual en los países del denominado primer mundo, de esta manera se interpreta que se trata de una estructura de población envejecida.
Se puede observar, fijándose en el grupo de 0-4, que existe una superioridad numérica en cuanto a los nacimientos de varones ya que estos son ligeramente superiores a los de mujeres. Esto ocurre en todas las poblaciones humanas puesto que existe una tendencia genética a que nazcan más varones que hembras. Sin embargo, cabe destacar, que posiblemente debido a la división sexual del trabajo y a los estereotipos patriarcales las mujeres sean más longevas que los varones puesto que los estos adquieren hábitos de consumo nocivos y desarrollan una actividad laboral donde emplean en su mayor parte la fuerza física, por tanto la esperanza de vida del varón se reduce.
Existe además un ensanchamiento de la parte superior de la pirámide ya que el aumento de la esperanza de vida fruto del desarrollo de la “sociedad del bienestar” en la Europa capitalista a partir de los años 60 provoca un aumento del porcentaje de ancianos. De esta manera, se observa la pirámide de población de una sociedad envejecida que tendrá problemas en tanto que el número de nacidos es mucho menor al número de personas que se encuentran en edad laboral y este número es inferior al del estrato superior.
Se puede apreciar un hundimiento de la natalidad a partir de 1975- Esto es originado debido a las consecuencias de la crisis capitalista de 1973 en la cual, entre otros motivos, por un incremento brusco del precio del petróleo se produjo un aumento espectacular del paro. Esto, a su vez, tubo consecuencias catastróficas en la reducción de la natalidad así como el retraso en la edad de contraer matrimonio. Lo que propició una disminución del periodo fértil de la mujer joven.
Posteriormente a partir de los 80, la precarización del trabajo juvenil y el difícil acceso a la vivienda por parte de los jóvenes obstaculizó su emancipación. Esto provocó un aumento del periodo de formación y de cohabitación en la vivienda familiar, sin olvidar la irrupción masiva en la vida laboral de los contratos temporales y los precios abusivos de las guarderías para las clases populares que dificultaron la conciliación de la maternidad con el trabajo. Aquí podemos denotar una vez más como actúa el patriarcado, relegando a la mujer al hogar y privándola de la independencia de poder trabajar-
También cabría tener en cuenta a la hora de explicar el descenso de natalidad en la sociedad española la nueva mentalidad propia de una democracia burguesa en la cual el peso de los preceptos católicos sobre la familia y la natalidad han ido perdiendo fuerza paulatinamente. La legalización del aborto en determinados supuestos y la difusión de los métodos anticonceptivos ha tenido consecuencias en la disminución de la tasa de natalidad (fundamentalmente los anticonceptivos).La incorporación de la mujer al mercado laboral, aunque no es en condiciones de igualdad salarial, supone un cambio ya que las mujeres posponen en muchos casos la maternidad hasta estabilizar su situación laboral. También se debería tener en cuenta que la concepción de las relaciones de pareja ha ido paulatinamente modificándose, donde se antepone la felicidad de la pareja a los fines reproductivos. Además de la aparición de nuevas formas de relación familiar, desde matrimonios homosexuales con hijos adoptados hasta por ejemplo la maternidad en solitario.
Hay que tener también en cuenta que las luchas populares por los derechos sociales desarrolladas en el tardo franquismo y la transición otorgaron una serie de beneficios en cuanto a la reducción de la jornada laboral, el incremento de los salarios o las vacaciones pagadas esto junto con la alienación en pos de mejoras materiales y de ocio ha hecho que la población de menor importancia a las tareas reproductivas y prefiera tener poca descendencia pero atenderla mejor proporcionándoles formación y bienestar.
Pero está tendencia de natalidad está siendo poco a poco modificada por la incorporación de la natalidad procedente de hombres y mujeres que se encuentran en nuestro país debido a la ruinosa situación de sus economías locales y acuden a España en busca de una estabilidad laboral. Los inmigrantes al tener una mentalidad distinta propia de sus culturas y poco acceso a los anticonceptivos en algunos casos, tienen una tasa de natalidad mayor y eso está produciendo una pequeña recuperación demográfica que se puede ver en sector de 0 a 4 años.
Cabe destacar el estrechamiento de la cohorte de población de los 65 a 69 años fruto de la guerra civil(1936-1939) en España que obtuvo como consecuencia una población con su vida normal alterada, provocando la muerte de miles de personas y a posteriori también graves dificultades económicas en la posguerra(1940-1955) debido a la gran destrucción de las fuerzas productivas y al restablecimiento de la propiedad en manos de la oligarquía. Esto junto con la política autárquica de principios del franquismo y el bloqueo económico internacional por ser el régimen del general Franco un aliado del eje fascista provocó que se desatara una dura hambruna por el territorio español.
El factor decisivo para el ensanchamiento de la parte superior de la pirámide lo tenemos en el descenso de la mortalidad y el aumento de la esperanza de vida, lo que ha provocado un envejecimiento más que notable de la población. La mortalidad por enfermedades infecciones es ha descendido mucho mientras que otras de carácter nervioso y asociadas a la tercera edad son cada vez más frecuentes como pueden ser el parkinson o el alzheimer.
El crecimiento natural es muy reducido debido a las bajas tasas de mortalidad y natalidad. El envejecimiento de la población crea problemas con los servicios que presta el estado como la sanidad, las pensiones o la asistencia social que ha de prestar a esa población mayor mientras que la base de cotización a la seguridad social se reduce y los servicios asistenciales y sanitarios deben de ampliarse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario